
La organización mayoritaria del sector se muestra preocupada por cualquier tipo de tolerancia con los grupos radicales de taxistas que no representan al sector del taxi y ensucian su imagen continuamente.
Madrid, 2 de mayo de 2017.- La FEDERACIÓN ESPAÑOLA DEL TAXI (FEDETAXI), presidida por Miguel Ángel Leal y que asocia a más de 42.000 taxistas de toda España, manifiesta y declara que condena, repudia y denosta los actos de violencia acaecidos en Sevilla, consistentes en la presunta quema intencionada de nueve vehículos dedicados al alquiler con conductor por la empresa Cabify.
FEDETAXI se encuentra preocupada por la sombra de duda que se cierne sobre los taxistas españoles en relación a estos hechos, y emprenderá acciones legales contra todos aquellos que se encuentren difamando la imagen del taxi y contra quienes realizan apología de estos actos en las redes sociales, de personas presumiblemente vinculadas a organizaciones que en nada representan al sector.
Por otro lado, FEDETAXI no puede admitir las acusaciones generalizadas que se están vertiendo por las multinacionales de la falsa economía colaborativa contra el sector del taxi, como si de energúmenos retrógrados se tratasen todos los taxistas, auto elogiándose estas multinacionales, de paso y por contraste, como se tratasen de benefactores sociales y portadores de La Luz del progreso, cuando sus prácticas de elusión fiscal, precariedad sociolaboral y otras, distan mucho de caracterizarles como empresas socialmente responsables.
Por último, el presidente de FEDETAXI, Miguel Ángel Leal, recalcó que “nos encontramos a espera de las pesquisas policiales sobre estos hechos, en las que colaboraremos en lo posible”. Recordó que “la inmensa mayoría de los taxistas españoles son trabajadores autónomos, honrados, y honestos y no los escasos energúmenos que se han podido ver en recientes programas de televisión y otros actos callejeros vandálicos”.
Leal hace un llamamiento “a todos los taxistas de bien de este país para que denuncien y colaboren con la justicia en la persecución de cualquier acto, persona o grupos organizados que con su comportamiento manchen su buena imagen y la de todos aquellos titulares de licencia y conductores de taxi que se ganan la vida trabajando honradamente” para lo que pone a disposición los medios económicos y legales de los que disfruta su organización.