El Ministerio de Hacienda ha confiado a la Comisión Europea las líneas maestras de la reforma verde de los impuestos de matriculación y circulación en la que lleva meses trabajando, pero que evitó dar a conocer cuando el pasado mes de marzo le tocó publicar el informe sobre el particular al que le obligaban las disposiciones operativas firmadas con Bruselas para acceder al tercer desembolso de 6.000 millones de los fondos europeos.
Montero salvó entonces el trámite con la publicación de un informe analítico sobre el asunto, que examinaba el funcionamiento de las figuras actuales, echaba un vistazo al panorama fiscal internacional y apuntaba algunas propuestas de reforma planteadas por los expertos reunidos por Montero, pero cuidándose mucho de no pronunciarse abiertamente a favor de alguna de ellas.
La evaluación preliminar de la Comisión Europea sobre los hitos e inversiones que han abierto a España las puertas del tercer desembolso de los fondos europeos, a la que ha tenido acceso ABC, revela que además de ese informe el Ministerio de Hacienda remitió a los funcionarios de Bruselas un anexo con el título ‘Propuesta de Reforma Hito 390’, que avanza el posicionamiento del Gobierno de España respecto a la reforma del Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte, más conocido como impuesto de Matriculación; y del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, el de Circulación.
Cobrar el impuesto a todos los vehículos
Según el informe publicado por la Comisión Europea, el Gobierno plantea una reforma integral del impuesto de Matriculación con el doble objetivo de convertirlo en una herramienta más de política ambiental y de mejorar también su potencial como arma recaudatoria, a favor por cierto de las arcas de las comunidades autónomas que son las que ingresan el impuesto.
El informe publicado en marzo constataba el escaso vigor recaudatorio del impuesto de Matriculación español respecto a las figuras vigentes en el resto de países que tiene un gravamen de esta naturaleza. En 2021 obtuvo una recaudación de 468 millones para una figura que según el informe de los expertos podría tener un potencial recaudatorio superior a los 2.000 millones de euros.
Para acabar con esta situación, el Ministerio de Hacienda se muestra partidario de eliminar todas las exenciones y supuestos de no sujeción que se recogen en la normativa actual y que no tienen relación alguna con criterios ambientales. Hacer tal cosa acabaría con las ventajas fiscales de las que hoy disfrutan segmentos como el taxi, las empresas de vehículos de alquiler, las autoescuelas o las empresas de atención en carretera, que gozan de una exención total sobre el pago del impuesto. Queda saber si el nuevo esquema también terminaría con la exención de que disfruten los vehículos poco contaminantes o con emisiones cero como sucede en la actualidad.
ABC