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Según datos ofrecidos hoy por la CAM en la presentación del Plan de inspección de transporte para 2019 y de resultados ejecutados en 2018, en el pasado efectivos se han efectuado 12.446 actuaciones de inspección a vehículos de viajeros hasta 9 plazas, correspondiendo 10.919 a VTC y 1.527 a taxis en trayectos interurbanos (es decir, no se computan las inspecciones o controles realizados a taxis en trayectos urbanos, revista municipal etc).

De estas actuaciones inspectoras se han producido 3081 denuncias a VTC, de las que se han procedido a abrir 2.824 expedientes que han resultado con sanción.

En el caso de los taxis sólo han sido sancionados 97 (en trayectos interurbanos), si bien la CAM no ofrece datos de las denuncias que se hayan podido producir en trayectos urbanos, que son competencia municipal.

En cualquier caso, hay que precisar que existen expedientes para ambos tipos de vehículos no computados que pueden corresponder a denuncias realizadas los últimos meses de 2018 que hayan sido iniciadas en 2019 y por tanto no se incorporan a la estadística.

Asimismo, se han realizado 12 inspecciones a plataformas digitales en las que se ha recabado importante documentación, de cuyo desglose y consecuencias en relación con el número de expedientes sancionadores incoados la CAM se ha comprometido a facilitarnos dichos datos.

Por último, las inspecciones a empresas o autónomos de taxis y VTC (no controles de calle a vehículos) fueron de 224, en su enorme mayoría (202) a empresas de VTC.

Los resultados de dichas actuaciones inspectoras arrojan una cifra de reducción del porcentaje de las infracciones cometidas por las VTC en 2018 respecto a las inspecciones de 2017, en torno al 15%, al pasar del 40% al 25% los expedientes sancionadores abiertos a estos vehículos. No obstante, hay que poner en contexto estas cifras pues a lo largo de 2018 se han incorporado más de 2000 VTC al mercado madrileño, habiéndose producido en torno a 10.000.000 de viajes en este tipo de vehículos, lo que por extrapolación nos arrojaría infracciones en más de 2.500.000 trayectos.

Estas cifras son escandalosas para la AGATM-FEDETAXI y constatan que las VTC se sustentan sobre un modelo de negocio infractor y de competencia desleal, así como la incapacidad de CAM y Ayuntamiento de Madrid para poner coto a dichas prácticas.

Pese al incremento de plantillas de inspectores en la CAM en 2018 se pone de relieve la insuficiencia de éstas para atajar está elevada tasa infractora, máxime cuando el Ayuntamiento de Madrid no ha realizado ningún esfuerzo parejo (tampoco han ofrecido datos al respecto) y las cuantías dejadas de recaudar por la ausencia de imposición de multas ascenderían a más de 600 millones de euros. Todo ello añadido al daño producido a la competencia y el incremento de la precariedad y otros daños asociados a un modelo de negocio sustentado en la vulneración sistemática de la norma, que una sociedad avanzada no debería permitirse.